Es un edificio defensivo erigido en el siglo XIII sobre una atalaya al suroeste de Tudela con el fin de vigilar el territorio, aunque su aspecto actual responde a posteriores reconstrucciones. Se trata de un edificio hexagonal de ladrillo en el que se integra la única evidencia de la época medieval, el aljibe, un depósito subterráneo destinado a guardar agua potable procedente de la lluvia.

La última reforma acometida lo ha convertido en la primera cámara oscura de Navarra y en un centro de interpretación con paneles explicativos sobre las culturas que han convivido en la capital ribera: la judía, la musulmana y la cristiana.La primera cámara de la historia fue concebida por Aristóteles quien para definirla apuntó: «Se hace pasar la luz a través de un pequeño agujero hecho en un cuarto cerrado por todos sus lados. En la pared opuesta al agujero, se formará la imagen de lo que se encuentre enfrente.

Así, un dispositivo que gira 360 grados capta la imagen de la zona que rodea a la Torre Monreal en tiempo real y ésta es proyectada en el interior de la cámara oscura. Además, en cada sesión, que dura veinte minutos aproximadamente, se revelan secretos sobre la historia, evolución y curiosidades de la ciudad. Una idea original que permitirá al visitante descubrir Tudela de una manera diferente.